En el sector del gran consumo, la automatización de almacenes ha emergido como una estrategia esencial para mejorar la eficiencia, precisión y sostenibilidad de las operaciones. Sin embargo, según un reciente informe de GS1 Italy (2024), la adopción de tecnologías avanzadas presenta una implantación desigual. La investigación, realizada con 62 empresas del sector productor (PRO) y de distribución (GDO), revela que las soluciones automáticas están principalmente concentradas en los centros de distribución (Ce.Di.) de la GDO, mientras que los almacenes de los productores siguen implementando soluciones en áreas de alto volumen o en almacenes centrales.

Factores que influyen en la automatización

Las diferencias en el grado de automatización se deben a factores estructurales, culturales y económicos. Los Ce.Di. de la GDO están más dispuestos a invertir en automatización, buscando flexibilidad y un equilibrio entre inversión y retorno operativo. En contraste, el sector productivo se enfrenta a barreras más complejas, especialmente en pequeñas y medianas empresas o en sectores con baja rentabilidad, donde la automatización a gran escala sigue siendo limitada.

Resistencias y retos culturales

A pesar de los evidentes beneficios de la automatización, como la reducción de errores, optimización de tiempos y mejora de la seguridad laboral, persisten resistencias en cuanto a la cultura empresarial y la estructura organizativa. Estas dificultades son más pronunciadas en los almacenes de los productores, donde la logística multireferencia requiere soluciones adaptadas y personalizadas.

Digitalización: clave para una automatización efectiva

La digitalización de los procesos es crucial para maximizar los beneficios de la automatización. No obstante, solo algunas empresas han adoptado sistemas avanzados de intercambio de datos a lo largo de la cadena de suministro. La visibilidad completa de los procesos, la trazabilidad en tiempo real y la integración de flujos informativos siguen siendo retos pendientes, en muchos casos debido a la falta de estándares comunes y la escasa colaboración entre actores del sector.

Tecnologías digitales y desafíos de interoperabilidad

Las tecnologías digitales más utilizadas incluyen gestión de inventarios, seguimiento de productos y automatización de procesos. Sin embargo, la interoperabilidad entre la GDO y sus proveedores sigue siendo un desafío, generalmente frenado por enfoques propietarios y resistencia a adoptar estándares compartidos. La estandarización y la colaboración vertical son fundamentales para avanzar hacia una logística 4.0 eficiente, que facilite la automatización y digitalización en todo el sector.