Líderes de empresas y organizaciones marítimas de la región se dieron cita en la ciudad de Panamá para participar en TOC Américas, un evento regional que por más de 20 años ha reunido a la comunidad internacional de la industria portuaria y de la cadena de suministro de contenedores en las Américas.

En el evento se desarrolló la conferencia de cadena de suministro de contenedores donde uno de los paneles se tituló «Revisión del mercado y comercio: ¿Qué está pasando en la industria?», donde la subadministradora del Canal de Panamá, Ilya Espino de Marotta, junto a otros representantes de organizaciones con interés marítimo analizaron los retos, necesidades y oportunidades a futuro.

La subadministradora expuso las estrategias implementadas para ofrecer el servicio de tránsito interoceánico durante los severos efectos climáticos ocasionados por la baja cantidad de agua de lluvia registrada entre 2023 y el primer semestre de 2024. “Nos enfrentamos a algo nunca visto: una baja en la cantidad de lluvias, un Canal ampliado funcionando y el 50 % de la población consumiendo agua de los lagos del Canal”, resaltó.

Espino explicó que estas variaciones climáticas, debidamente registradas y estudiadas por técnicos del Canal, muestran la necesidad de garantizar la sostenibilidad de la vía acuática para asegurar su funcionamiento efectivo. Por ello, se está proponiendo la construcción de un nuevo reservorio de agua como alternativa a corto plazo, así como una serie de acciones que buscan reducir la cantidad de emisiones de carbono en las flotas operativas del Canal y disminuir el tiempo de espera de los buques con efectos a largo plazo.

LoTSA, un paso hacia la reducción de emisiones de carbono en el mar

Durante la exposición se amplió sobre el efecto positivo para la protección ambiental del nuevo del Sistema de Reservas de Tránsitos por Adelantado o LoTSA (Long-term Transit Slot Allocation), presentado por el Canal de Panamá recientemente.

“El sistema de reserva de cupos por adelantado busca programar el paso de los buques con anticipación para que el tiempo de espera para el tránsito sea menor y genere menos emisiones de carbono mientras esperan”, destacó la subadministradora.

El Canal de Panamá se ha propuesto certificarse como una organización carbono cero para el año 2050, atendiendo al compromiso corporativo de generar cambios operacionales que promuevan la protección ambiental como pieza fundamental de la vida humana y del funcionamiento de la vía interoceánica.